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| Madres y niños en una ludoteca. Cumaná-estado Sucre. UNA. |
La actual realidad social en nuestro país, señala a la institución familiar como escenario de formación y socialización, donde tiene su asiento la constitución del ser humano desde los valores y las practicas compartidas. Esta idea se centra en postulados relacionados con una visión del hogar como institución fundamental y base de la sociedad venezolana, contexto en el cual es posible sentar las bases del funcionamiento de todas las otras instituciones sociales. Ello señala el surgimiento de una doctrina para la protección de la familia por parte del Estado y otras instancias, expresada en políticas sociales para el apoyo, defensa y protección a cargo de instituciones y organismos que la dignifiquen y salvaguarden su existencia.
Esta preocupación señala la necesidad de incidir en forma contundente en factores que condicionan y caracterizan a la familia como una de las instituciones sociales con mayor movilidad, complejidad y diversidad, pero también inestabilidad. En el orden social, cumple funciones dirigidas a la formación primigenia del ser humano, haciendo énfasis en los procesos socializadores del hombre, del ciudadano.
A partir de la neceesidad de dar respuestas contundentes a los grandes desequilibrios de nuestra sociedad y en el entendido que al incidir en la célula social fundante que es la familia, emergen programas educativos alternativos enmarcados en una nueva modalidad llamada Atención Educativa No Convencional. Esta tipo de atención se dirige, desde sus inicios, a fortalecer a las familias venezolanas en cuanto a la importancia del desarrollo infantil y las estrategias para promover ese desarrollo. Todo ello con base a que los adultos significativos juegan un papel fundamental cuando interactúan con niños pequeños, en comunidades de escasos recursos.
Dentro de esta concepción educativa se ha brindado auge a la incorporación de factores prioritarios para el logro de esta nueva visión del mundo infantil, ante lo cual se plantea la necesidad de cambios sustanciales en las características vivenciales de la niñez temprana y su realidad social. Transformación que debe considerar la búsqueda de ambientes que favorezcan el aprendizaje hacia el desarrollo pleno del ser humano, sus capacidades y potencialidades, respeto del mundo interno del niño/niña, su afectividad, valoración del juego infantil y atención al desarrollo del lenguaje con enfoques multiculturales. Para estos fines es fundamental la vinculación de la familia en el proceso educativo, a través de la participación y la reflexión de su función fundamental como agente socializador. Así, “el ambiente familiar viene a ser la primera oportunidad que tiene todo ser humano para constituirse como tal” (Myers, 2000 p. 2).
Como estrategia vinculada con este tipo de atención se puede señalar a la Ludoteca como un espacio de encuentro para los niños donde el protagonista es el juego y el aprendizaje a través del mismo.Aquí, niños y adultos interactuan con los materiales configurando un escenario de experiencias en donde la relación padre-hijo se solidifica a través de las actividades lúdicas, modificando la tradicional relación paterna hacia otros horizontes en donde el adulto asuma responsablemente su papel de estimulador del desarrollo infantil. Es por esta razón que este programa no puede ser visto como un servicio educativo cualquiera, o un espacio para el cuidadado y la formación infantil, puesto que la finalidad que lo mueve es la formación, ahora, de ese adulto que tiene la responsabilidad de atender, cuidar y proteger niños y niñas.
De allí que los principales objetivos que pretendemos conseguir en la Ludoteca son:
- Favorecer el desarrollo cognitivo, psicomotor, afectivo-social y de la personalidad de los niñ@s a través del juego, los juguetes y las actividades lúdicas adecuadas a cada edad.
- Proporcionar a los niños y niñas un espacio especializado en el juego y los juguetes, donde aprender jugando, divertirse y desarrollar su imaginación y creatividad junto a su grupo de iguales.
- Facilitar la integración y el desarrollo de los niños con necesidades educativas especiales y con alto riesgo de marginación social a través del juego, ya que éste es un elemento integrador que consigue que éstos adquieran rutinas, normas simples, valores sociales y de convivencia... etc.
- Afianzar los conocimientos académicos básicos que van adquiriendo en la escuela por medio de una metodología lúdica
